sábado, 31 de diciembre de 2011

El Recuerdo del Jamás




Si le doy la espalda al siempre
y miento al nunca más 
me surge siempre el depende, 
y se hace patente el jamás. 
Y si miro a los ojos al quizá 
con fingida seguridad
el resultado al final del día
es que ya todo me da igual.

Por mucho que me esfuerzo
la respuesta siempre es no. 
Por mucho que el tiempo pase 
me sigue causando dolor.
Por mucho que lo piense 
aún tengo palabras de amor 
que dicen que tú ganaste
mucho más de lo que perdí yo.

No son las promesas incumplidas, 
ni es la esperanza del adiós.
Es el tiempo que pasamos
traicionados por nuestra voz.

Creímos que éramos los únicos
hablando el idioma del volar
en un mundo de mentira
que pensamos podríamos cambiar.
Convertimos el sueño en deseo carnal, 
lanzamos los dados al aire
sin pensar en el riesgo que había
al convertir el cariño en banal.

Así nos separaron los secretos,
la desidia, 
las mentiras 
y un millar
de situaciones desesperadas
por no saber vivir 
sin tener a quien amar.

Ahora somos tan distintos 
como nuestros besos 
mucho antes del final 
y los que se dan  
dos extraños en un bar. 
Besos, 
nunca imaginamos
que nos iban a matar.

miércoles, 28 de diciembre de 2011

Señales Triangulares





Calor, 
calor interno, 
en la caldera del estómago
como sólo de vez en cuando se atiza
y que invariablemente acaba
con mi silueta en el suelo
dibujada con blanca tiza.

Qué soy sino una estela que se vaporiza?

Siguiendo las instrucciones
de mi manual del usuario
escrito en braille, 
con los dedos mutilados
tras horas de discusiones
conmigo mismo desdoblado,
con aire de reponsable y serio
sentado en el sofá,
casi siempre estando ebrio.

A qué recurro si el destino desemboca en pelea?

Presunciones de inocencia
sin demostrar lo contrario
al juzgar mis acciones, 
sin tener una triste ofrenda
que dejar en pago al oráculo
por sus más grises predicciones.

Dónde está la animosidad inquebrantable?

Ya he estado aquí antes,
ya he tenido este desasosiego;
ya he vivido este capítulo
que acaba pintado de negro.
Ya he visto lo que hay
detrás de este sueño ingenuo.
Ya he tomado esta bifurcación
que lleva directa al infierno.

No saber leer lleva inevitablemente al desastre?

Aún así, orgulloso habitante 
de un emocional desguace, 
buscando entre los despojos 
alguien que me abrace.
Saltando todas las señales,
todos los semáforos en rojo,
corriendo sin una pierna, cojo,
mientras se caen los pañales.

Es convertirse en adulto ser consciente de la masacre?

No sé si es que no aprendo
o que gastar energía me da lo mismo,
que me creo que puedo con todo
saltando con carrerilla al abismo.

No sé si es que ya me da todo igual
o que a todo le doy importancia.
A lo mejor vine a este mundo
a aprender todas las lecciones mal.

Tal vez es que necesite ser testigo
de todos mis actos instantáneos;
quizá sea que me estoy convirtiendo,
sin pretenderlo, en mi mejor amigo.

martes, 20 de diciembre de 2011

Mes Raruno



Hay horas, días y meses que son rarunos.

Yo estoy en un mes raruno de esos.

De esos que no sabes el día en que vives.
De esos que las horan pasan porque tienen que pasar.
Son de esos que cualquier novedad se recibe con una fiesta,
de esos en los que las celebraciones carecen de sentido.
Son de esos en los que me gustaría decirle a ciertas personas que las quiero, pero no quieren oírlo.
Son meses en los que echo de menos la inocencia del pasado.
Son de esos en los que mirar atrás es obligatorio, aunque lo que vea me parezca divertido (ahora, claro, en su momento no me hizo ni puta gracia).
De esos meses en los que no vuelo lo suficiente.
Son esos meses en los que, aunque no quiera y reniegue de su significado, hay algo dentro de mí que dice que son especiales y que en ellos puede pasar cualquier cosa.
Meses en los que parece que todo ha sido una pérdida de tiempo, pero aún así me resisto a creerlo. No quiero creerlo. No puedo. De ninguna manera.
Son esos meses en los me acuerdo de las personas que estuvieron, pero no están.
Meses en los que veinticinco años atras había una magia que no puedo explicar con palabras.
Esos meses en los que rompo alguna barrera y dejo de estar asustado.
De esos en los que, no se por qué, tengo que darle las gracias a alguien por esta vida que me ha tocado.

Meses muy curiosos, por otra parte.

Este es un mes de esos.

lunes, 19 de diciembre de 2011

Oído Cocina




Oigo hablar de malentendidos,
oigo hablar de ofensas.
Oigo dar forma a los recuerdos
no como son, 
no como eran,
sino como cada uno de nosotros
prefiere sacarlos fuera.

Oigo ladridos de rabia
y palabras inconexas.
Oigo un poco de la vida escapar
en cada una de mis caladas.
Oigo más reproches,
oigo más palabras insanas
que caricias en la piel
en mis orejas desgastadas.

Oigo golpes en la pared,
indescifrables por naturaleza.
Imagino que son coletazos, 
peces ahogándose fuera del agua, 
pidiendo auxilio a gritos,
demostrando que por lo menos alguien
se aferra a una vida improvisada.
Pero resulta que son sólo las quejas
por los ruidos de madrugada. 

Oigo sirenas en la distancia,
como surgen y como se apagan, 
sonando, 
no amenazadoramente, 
sí como el tiempo que se acaba.
Que raro debe de hacerse 
ver a la muerte 
venir a por nosotros
disfrazada de ambulancia.

Oigo temblores de tierra
que revuelven las entrañas
de los perros, pájaros y gatos
mucho antes de que nos demos cuenta
de que tiemblan los cimientos. 
Fijados sobre arenas movedizas,
principios inciertos,
hacen un ruido insoportable
cuando se derrumban, 
dinamitados. 
Es más fácil reconstruirlos 
según dicte la conveniencia.

Oigo demasiado a menudo
que no se puede hacer nada, 
hay que vivir con ello,
no tenemos mas ganas
de asumir y reaccionar.
Es preferible siempre
la medicina que quita el síntoma
que el dolor que al final sana. 

Oigo el cambio aproximarse,
hablándome en una lengua muerta:
el idioma de los valientes
al rehusar rendirse,
dispuestos a continuar la partida
sin miedo a perder la vida, 
sabiendo antes de empezar
que está irremediablemente perdida.

Oigo a los sueños revolverse en sus camas
por no saberse especiales. 
Por estar confundidos.
Porque nadie nunca los dibujó
exactamente como son, 
irreales,
poniéndoles esa mirada en sus ojos
que los convierte en inmortales.





lunes, 14 de noviembre de 2011

Des-varíos varios




Fidelidad, hojas secas.
Combatividad, siestas estivales.
Expectativas, cartero comercial.
Perpetuidad, cañones en la sien.

Interminables cafés en compañías deseables,
es este el ideal de la comunicación?
Pásame un dátil de esos
que se me seca la boca y quiero aprovechar
para decirte todas las cosas que nunca te dije
a poder ser con la lengua pastosa.

Embriaguez, ya conduzco yo.
Desconfianza, échame una firma.
Distancia, estoy aquí.
Orgullo, tengo mi propia cuchara, gracias.

Suena el despertador y es de noche,
que mal hice para merecer esto?
Debería salir el sol
pero está en huelga de celo
porque dejamos de adorarle
para adorarnos a nosotros mismos.

Averiguaciones, cierra el cajón.
Parsimonia, sujeta ese impulso.
Inocencia, en la cola del paro.
Compromiso, eso lo serás tú.

Beber para olvidar es como escribir
para desenterrar cuerpos inertes
que nadie se molestó en autopsiar.
Son evidencias de un crimen
que se resuelve por sí sólo
mirándote a los ojos.

Constancia, esa gran desconocida.
Perspicacia, quebraron los proveedores.
Respeto, en la suela de la zapatilla.
Hostilidad, hay que desempolvarla.

Lenguas de agua turbia
en el valle de los caídos
al paso de la incomprensión.
Qué hace despegar los párpados
del blanco de los ojos
excepto la ilusión de que hoy no es ayer
y que mañana no será emocionalmente laborable?

Espumarajos, señal de convicciones profundas.
Fundamentos, se comen unos a otros.
Histeria, tremenda adolescencia crónica.
Catársis, la mía doble con hielo.

Casi llegó la tarde grisácea,
nevera vacía por pereza,
el colmo de la desgana.
Gracietas de mediodía,
para qué?
Si está nublado....

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Azufre para Desayunar




Sé que algo no anda bien
según entras por la puerta.
El tono de tu voz, 
el timbre, 
son signos inequívocos del sudor
bajando por tu espalda, 
tus manos, 
tan frío que eres capaz de ignorar
el sentido que tiene para mí llorar.

Noto en mi nuca la respiración
de tus intenciones con olor a azufre.
A mí también me vienen mal dadas
de cuando en cuando,
pero mi cara mala me la guardo
para mi espejo del salón
no para tus gin-tonics de madrugada.

Que me retires el saludo,
que no me preguntes nada,
que no te apetezca verme
por alguna chiquillada.
Que creas tener razones
para empujarme a un lado
porque dije alguna cosa
e hice la contraria.

Sentirme cuestionado
por tus juicios de mermelada
no hace más que ponerme
en estado de alerta naranja.
Qué pasa que no me conoces?
Por qué esa cara rara?
Si estoy para lamer heridas,
para bañarme en tus risas,
para cuando tenemos frío,
para cuando nos tocan la fibra, 
para las buenas y para las malas?

A todo esto soy permeable,
no creas que no me hacen mella
estas situaciones descaradas. 

No creas que no miro por la ventana
pensando en llamarte por tu nombre
y tragarme tus cortas pero afiladas,
claras pero sangrantes charlas. 
Me pone más triste tu desprecio
que doscientas historias de amor
por la rutina mal terminadas. 

viernes, 4 de noviembre de 2011

Cualquier Día





Cualquier día de estos voy a hacer una tontería
como parar un autobús a punta de pistola
y decirle que me lleve sin paradas al infierno
a ver si allí consigo vender todo el hielo
que se ha escarchado en mi hipotálamo
por dejarme abierta la puerta del cerebro.

Cualquier día de estos voy a hacer una estupidez
como saltar por un balcón decorado con geraneos,
a ver si así me doy cuenta de que no puedo volar
y se me quita esta sensación tan tonta
de que me paso la vida en las alturas
rodeado de caras duras.

Cualquier día de estos voy a salir a un limbo paralelo
con una cesta de picnic y un mantel de cuadros
y me voy a merendar todos tus despechos y sinsabores
con una mostaza picante con pimientos
a ver si así se me quitan estas ganas
de pensar en ti todo el maldito tiempo.

Cualquier día de estos voy a sacar la fregona
y me voy a poner a limpiar los pies negros
de todos los que van descalzos sonriendo
mientras pisan la hierba de los sagrados jardines
regados con lágrimas resbalando por los tallos
de los más marchitos y débiles jazmines.

Cualquier día de estos voy a atar cabos,
uno tras otro,
y voy a llegar a todas las atrevidas conclusiones
que dicen que me absolverían en cualquier juicio,
que ya pagué por todos los pecados del pasado.
Ya estoy harto de oír en el tímpano el chirrido
de las risas de los otros internos del hospicio.

Y es que cualquier día de estos aparezco
por sorpresa en tu vida, estable y tranquila,
y te sacudo todas las inseguridades sin piedad,
mostrándote lo que de verdad es mentira:
que no me insultas besándome en la mejilla,
que tienes alguna idea de quien soy,
que no me gustan las cosas sencillas,
que eres una muesca más en mi mesilla,
que no hay nada de especial en saberte única
aunque sea en mis más mórbidas pesadillas.

lunes, 24 de octubre de 2011

Stray orange Cats



Stray orange cats
that´s what we are.
Watching the rain
from our own flat.
Waiting to be fed
by who said to be
our owners by chance.
Cleaning our clutches
the morning after
a dawn patrol night;
taking other animals lives
just for the sake of fun
because, even if we have food
it is the spirit of the hunting
what makes us feel alive.

Crystal yellow eyes,
orange smooth hair,
always with one open eye,
any noise will just wake us up.
Easy to love,
not so easy to understand.
Jumping from too high balconies,
on our feet we always land.
Before getting to know us,
you must try to understand
our nature painted in black;
i suggest you should start
the sooner the better,
telling you no lies.

Stray orange cats,
miaowing at stars,
feline instincts arising,
sharpening nails on the rug.
Sleeping fourteen hours a day,
but always with a target in sight.
Moving our hairy tails
through the morning light.
Asking for every desire
we ever might get to want.
If you stop scratching our bellys
an abrupt day ending you´ll find.

Stray orange cats,
we are distracted by flying flies,
we love bugs and lizards,
we are aware that the big game
is played usually outside.
Keeping us indoor
will only make us mad.
We are vengeful,
you already know that.
It is the nature of the beast
as we are supposed not to lie
but giving out excuses
to you for not attending
the fussy quirks we have.

Your plastic slippers to bite,
just one sock to hide,
making your side of bed
our favourite place for a nap.
Your favourite stuff
is our favourite too:
the difference we know for sure
between your grandma´s jersey
and your first date best wool.
But anything we do
is just alright
if you take us on your knees,
do not look inside our eyes.
Keep on stroking our foreheads,
pushing us against your breasts,
make us calmly purr inside.
No matter what your beliefs are,
we are just stray orange cats.

sábado, 22 de octubre de 2011

57 Idiosincrasias




Enamorarse compensa siempre. 

Los juegos nunca son de azar.
Buscar no garantiza encontrar, pero ayuda.
Las cosas que nos rodean podrían no estar donde deberían.
Los días son para recordar y las noches para soñar.
Los defectos son necesarios pero las virtudes hay que ganarlas.
Los talentos son innatos, sólo hay que encontrar los nuestros. 
El miedo es un poderoso motor, pero el amor lo es más.
Comerse los mocos está mal visto; también lo está la soledad. 

Cuando hay luna llena pasan cosas.

Una puerta cerrada siempre abre una ventana.
Demasiado dulce empalaga.
Vencer los miedos es un placer supremo.
Hay promesas hechas que no se van a cumplir nunca.
Madrugar debería estar prohibido por ley.
El fútbol es un circo romano moderno.
Todos somos culpables de tener el planeta enfermo.
Sabes que sigues amando cuando echas de menos.

Toda situación es susceptible de empeorar.
Decir que no se puede hacer nada nos impide hacerlo.
El único lujo que no nos podemos permitir es perder el tiempo.
Los pecados no se lavan, se aceptan.
Tropezamos con la misma piedra adrede.
Estar asustado a veces es inevitable, pero no sirve de nada.
Todo el mundo tiene algo que decir. 
Besar el suelo por el que pisa alguien no es amor, es una enfermedad. 
Hacer chantaje emocional es una bajeza.

Nos cuesta más pedir permiso que pedir perdón.

Muchas palabras se las lleva el viento, pero algunas no.
Las herramientas son para usarlas sin miedo.
El orgullo es el rival a batir.
Las resacas van a peor con los años.
Vomitar es asqueroso, pero a veces necesario. 
La autocrítica es señal de inteligencia. 
Hay que estar loco para hablar solo, pero la locura está generalizada. 
Los perros te tratan como a su amo, los gatos como a un igual.

Esperar que los demás hagan lo que nosotros queremos es estúpido.

Los platos rotos no tiene por qué pagarlos nadie, pero siempre alguien pasa por caja.
La peor situación posible es tener frío, hambre y sueño, todo a la vez.
El perdón no es concedido a la primera, a veces no llega nunca.
Por qué pasan las cosas no es la pregunta, sino para qué.
La mayoría de las enfermedades son psicosomáticas.
Identificar y asumir las frustraciones es difícil, pero se aprende.
El alcohol es como la hipnosis: no se hace nada bajo sus efectos que no se haría sobrio.
El inconsciente decide, la razón sólo justifica la decisión.
Todo es susceptible de cambiar, incluso las personas.

Sí elegimos de quien nos enamoramos,
pero el amor no es siempre suficiente.
Todo seguirá cuando ya no estemos.
En las ferreterías no venden clavos para apuntalar la sociedad.
Bajo la cama no hay monstruos, sólo pelusas sin limpiar.
En el primer mundo se vive bien porque en el tercero se vive mal.
Caminamos haciendo la vista gorda ante innumerables crímenes cotidianos.
Los principios y los precios de las personas se miden en la misma unidad de medida.
No podemos cambiarlo todo, pero podemos empezar por cambiar nosotros.
 
Todo el mundo hace lo que quiere, no lo que puede.
 

Y todo lo anterior es discutible por definición. 
 

 

jueves, 20 de octubre de 2011

Rayos (catódicos) y Centellas (anónimas)




Te vi, 
te sentí en rayos catódicos. 
Por suerte, 
por casualidad, 
por el destino, 
las tres cabezas del can, 
bocas sembradas de caninos, 
que guarda la entrada 
de un paraíso efímero. 

Aunque en ninguna de las tres creo, 
imaginé que aquella vez sería distinto. 

Porque tu sonrisa, 
tus reservas, 
tus labios, 
tu nariz, 
tu cara, 
y tus ojos negros 
eran hambre para hoy, 
pan para mañana. 

A sabiendas de eso, 
escribiendo mi cuento 
que tú protagonizas 
y yo sólo leo, 
atento, 
no parece que el final 
sea propicio desvelar. 

Quizá sea mejor así, 
sin terminar. 
Así tú te quedas tranquila 
y yo no me dejo llevar; 
Lo recordaremos con cariño 
sin tener curiosidad, 
quietos y silenciosos, 
por ver como va a acabar. 
A salvo de nosotros mismos 
sentados aquí en la orilla, 
tan sólo mirando el mar.  

Más allá de ese horizonte, 
de anaranjado a amarillento,
aguarda el desenlace abierto
que no por ser tan irreal 
es más denostadamente incierto. 
No por no ser verdad es 
más propicio el desencuentro. 

Es curioso como a veces la vida 
se esfuerza en contarme historias 
ilusionantes en el paladar, 
que en el estómago se amotinan.  

Pero siempre, 
al final, 
son mis bolígrafos, 
mis pinceles y rotuladores 
actuando por su cuenta, 
los irresponsables 
de mis acciones. 
Esforzándose por sacar 
a los demás los colores, 
sus brillos marmoleos,  
sus reflejos de vida. 

He de confesar 
la verdad que me atosiga: 
lo único que me queda 
al finalizar el día 
es dibujarte a ti,  
porque la única certeza 
es que nunca serás mía. 

lunes, 3 de octubre de 2011

Sugerencias y Avisos por Correspondencia





Recomiendo servirme en frío, 
intenso, 
sin guarnición, 
sin entrantes de diseño, 
sin pensar en rosáceos todo el tiempo. 
Soy de comer con vino y sin cubiertos. 
De postre me gustan los dulces
y averiguar debajo qué llevas puesto.

No tengo manías persecutorias dentro
ni hago caja con lo que no es nuestro; 
no me gusta mear fuera del tiesto
ni duermo con un ojo abierto. 
La cara descubierta en estos tiempos 
se me quedó así, 
es otro defecto.

No agarro por el mango si no estoy dispuesto
a usar la fuerza como último intento.
Sólo me abrigo por el frío del invierno
y no grito al oído si me estas oyendo. 
No piso sin mirar tus zapatos nuevos
ni me clavo tus tacones sólo por hacerlo. 
No te abrazo por la noche por estar contento,
te beso cada vez menos porque así lo siento. 
Y ni te ponen a prueba mis malos recuerdos
ni aireo mi ropa sucia a los cuatro vientos. 

No doy salida a tu rabia
porque no me miro en ese espejo.
No te tiro de la lengua 
porque prefiero tirarte de los sueños.

No salto tus verjas 
si tu no me dejas.
No canto tus poemas, 
no leo tus acciones,
no juzgo tus miedos,
no tengo esas ambiciones.

No hago el amor,
doy placeres inversos.
No hago trenzas ni coletas, 
me gusta el pelo así, 
suelto.
No te doy esperanzas de nada
porque nada me resultó eterno.
No te agarro por la calle 
porque no estaría siendo sincero.
No jugaría con tu respeto
porque ya estoy despierto. 

No hago las cosas por despecho 
ni le consiento a nadie hacerlo. 
Mis rarezas son constantes, 
ante las tuyas no protesto. 
Y no tengo ocultas verdades; 
si me preguntas, 
yo contesto.

Todas mis cosas, 
todos mis secretos, 
están bajo la llave 
que pende de tu llavero.
Y esto tienes que entenderlo; 
porque no me pasa nada malo, 
tan sólo resulta que, 
al final, 
no es que no sea listo, 
es que estoy aprendiendo.



sábado, 1 de octubre de 2011

Pedir por Pedir





Qué le pides a los dioses 
antes de ir a dormir? 
No estar solo entre sábanas estampadas?
No tener que preocuparte jamás nunca 
de cuentas bancarias 
que ni sabes dónde están?
Pides que la parca no te lleve 
antes que, 
al menos una vez más, 
se te permita amar?

Pides que el pasado 
tenga la decencia  
de aceptarte tal como eres, 
inseguro y mortal, 
sin tener en cuenta los errores 
cometidos por tu ego, 
al mando,  
sin preguntar? 

Pides que se te corten las alas
para que ni a ti ni a los demás
puedas volver a maltratar?
Pides tener los papeles en regla,
el camino bien asfaltado 
y actualizado el mapa del mar? 

Pedir por pedir, 
pides por ti o por los demás?
Distraído por definición, 
por aburrimiento,
es pedir el ejercicio 
o agradecer lo es más?
Buscas algoritmos en vasos de cristal 
por ver si se hace la luz blanca 
y das con la fórmula universal?

Tal vez sea menos pedir, 
tal vez sea más dar; 
tal vez mires y no veas, 
tal vez sea tu destino matar.
Y tal vez sólo te suba la fiebre
cuando las musas te miran mal.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Otoños de menos, Primaveras de más






Otoños de menos, primaveras de más. 
Parálisis inducida por protestar. 
Pinchazos en el pecho por no hablar, 
cascadas de recuerdos sin curar.
Calores internos azuzados por el azar, 
hambrientos instintos por saciar.
Secuelas de la educación preescolar 
me evocan disparates al despertar. 

Otoños de menos, primaveras de más, 
períodos estivales que contabilizar. 
Mi verano es tu invierno, 
tu candidez mi peligrosidad; 
tu inocencia se torna belleza, 
tus labios me miran curiosos, 
tus ojos me saben familiares 
pero tus palabras me las sé ya. 

Otoños de menos, primaveras de más, 
encontrando siempre al dejar de buscar. 
Escarbando en la arena, 
improvisando, 
como siempre, 
dejándome llevar. 
Haciendo de riachuelillos 
enormes fragmentos de aquel mar 
por el que me obligo, 
siempre, 
a transitar. 

Otoños de menos o primaveras de más, 
tiempos extraños de impronta castidad.
Decenas de impulsos en la mitad 
se interponen entre lo que es verdad: 
que yo no puedo y tu no estás, 
que hay un mundo entre nosotros,
que yo soy viejo y tú no eres más 
que el reflejo de mi soledad.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Perspectivas Anodinas






Menosprecio a las alturas, 
calientes espasmos de mañana 
filtrando los líquidos densificados 
por la harina de tu corteza. 
Carpetazo de salida, 
corre, 
no tienes tiempo para mentir? 
Son las mentiras de los demás 
las que te hacen derretir?

Qué hay de las perversiones, 
qué hay de las afrentas? 
Qué hay de los combates 
sangrantes a tumba abierta?
No tenemos visión de futuro, 
todo se nubla humedecido 
por circunstancias escamadas 
porque de nada estoy seguro. 

Sólo en la pelea verbalizada, 
bajo las reglas tradicionales, 
llego a tener consciencia 
de la gravedad de tus palabras.
Sólo dentro de los límites 
puestos a mis indecencias, 
a mis vicios, 
a mis carencias, 
se intuye mi verdadera esencia.

Una ducha no ayuda; 
unas sensaciones raras
recorriendo la espalda,
como queriendo decir algo, 
pero al final no dicen nada. 
Tan sólo son el reflejo 
de otra dosis de realidad 
dura, 
triste 
y mal encajada.

Aún sacando la bandera blanca 
aceptando mis miserias, 
aún teniendo en cuenta 
que me rindo, 
no hay problema, 
aún sacando todo fuera, 
no se me concede la tregua,
pues no se cogen prisioneros 
en esta innecesaria guerra. 

La amistad, 
difícil empresa
a la que nada nos liga, 
ni ata, 
después de compartir cama, 
desayunos con galletas, 
ebriedades de medianoche, 
preguntas y confesiones, 
recuerdos en la distancia, 
mentiras 
y decepciones. 

miércoles, 31 de agosto de 2011

Consentimientos Alucinógenos






Alucinógenos gérmenes consentidos
en largas tardes de invierno.
Azules pastillas de atrevimiento 
que se atragantaron sin remedio. 

En hojas en blanco masticadas 
con los dientes amarillentos 
unos lápices sin punta escriben 
versos de tiempos pretéritos. 

Lo confieso, lo he consentido: 
a mí, mis propios miedos.
A ti, tus finos hilos
moviendo mis tristes dedos.

A vosotros, compinches en vida, 
los más variopintos excesos.
Y miradas de dulce envidia,
a ellos, personajes ajenos. 

Qué siniestros se vuelven los recuerdos 
cuando nos sabemos culpables y reos. 
Qué ignorantes enanos vemos
al mirarnos en los espejos.

Qué heridas supurantes vamos a cicatrizar 
si en ellas vertemos venenos?
Qué hacemos aquí parados 
viendo pasar el tiempo?

Qué esperamos encontrar valioso 
si hemos perdido el centro?
Qué queremos para nosotros 
si al resto hemos descubierto 
y estamos totalmente dispuestos 
a ser sus juguetes muertos? 

sábado, 27 de agosto de 2011

things i like

clarificadores cielos de agosto encapotados por nubes imaginarias,
estados de salud mental agria como leche en la nevera postvacacional.
esperas en círculos sobre aeropuertos congestionados nasalmente.
orgullos de mediodía a sabiendas de las debilidades ajenas.

bajantes desde tejados altísimos por las que asoman las telarañas.
porciones de sentimientos recalentados servidos en buffets libres.
insobornables espíritus de otra dimensión marcando tendencias.
peticiones de mano en contenedores de basuras reciclables.

llamamientos al orden por parte de agentes infecciosos contagiosos.
pérdidas de compostura al descoserse los botones del mando a distancia.
policías antidisturbios con porras de hojaldre sobre un coulis de fresa
atacando a manifestantes hipnotizados por los vahos de eucalipto.

misas negras en mareas de tinta de calamar gigante al anochecer.
paseos a la luz de las urnas electorales, pero sólo los martes.
contracciones traqueales producidas por devorar doscientos peta zetas.
granadas de mano para volar la imaginación de la seborrea galopante.

esturiones de piscifactoría desovando sus caviares por las esquinas.
catálogos del teletienda para multimillonarios venidos a menos.
espasmos de síndrome de estocolmo remitiendo por salir del metro.
curvas atrevidísimas cruzando pasos de cebra con el semaforo en ámbar.

pájaros de la noche revoloteando sobre víctimas perseguidas por hacienda.
vinilos de grupos indies cosidos con un finísimo hilo musical de ascensor.
pensamientos abruptos sobre divinidades hindúes en la cola de la pescadería.
polaroids de taiwanesas con los nombres cambiados para no ser las raras.

espuma de afeitar blanca en el cuero cabelludo para disimular las canas.
carraspeos involuntarios al saberse calado por artistillas malcriados.
medias noches rellenas de foie hecho con hígado de beodo recurrente.
catársis mentales en días de diario, no necesariamente en invierno.

viernes, 12 de agosto de 2011

Gastronomías Emocionales



Encender los ojos al nuevo día
es derretir la parafina del universo.
Introducir en los pulmones sus vapores
produce cáncer mortal de necesidad,
pero no queda otra.
A ver si nos entendemos,
todos estamos hechos
de la misma pasta fresca.


Lo que entra
por esos ojos recién abiertos
es sólo parte de los entrantes.
Y siempre el primer plato sabe mejor
acompañado de seres inferiores.
No como con los segundos,
en los que uno reconoce a sus iguales,
aunque sólo sea una ilusión desmedida
de la lucha de egos internos.


Ver al que parte el bacalao
tomar cartas en el asunto
es toda una experiencia.
Con esa autoridad que sólo tienen
los que han estudiado las esencias
de cosas importantísimas
que se enseñan sólo a las mentes inquietas
en escuelas donde ganar se gana mucho
pero se pierde la inocencia.


Sin embargo,
es siempre a los postres
cuando se descubre el pastel.
Son los dulces entonces
una declaración de intenciones,
sin excepción.
Se hace uso de las riendas,
indiscriminadamente,
y se obedece sin disimulo
con la elegancia de los muertos,
que por no llevar,
no llevan ni la contraria.


Y es ahí,
y sólo ahí,
cuando se ve esa pasta
de qué está rellena.
Entre los cafés,
las copas vacías
y los digestivos,
cuando se pide la cuenta.
Es ahí cuando quien paga, 
paga, 
y quien es convidado
dimite de sus funciones.
Y, evidentemente,
se ven los plumeros
desde la copa 
de las palmeras.


Para entonces no sabemos,
estamos totalmente seguros
de la indigestión.
Sabemos que el dolor
será permanente
aún viendo a un especialista.
Se producen entonces
juramentos infames
invocando el nunca jamás
sabiendo a ciencia cierta
que la tentación nos puede,
a quién vamos a engañar.


Así que propongo,
de ahora en adelante,
no tomarse las comidas
a la tremenda.
Pedir de la carta 
con libertad
y franqueza
siempre lo que más 
nos apetezca.
Beber sin mirar atrás
buscando de reojo
a quien nos persigue,
la conciencia.
Y al pagar,
pagar todos a escote,
por aquello de mantener
un poco la decencia.




sábado, 6 de agosto de 2011

Sin-Sen-Tido





Deliberadamente sin tiempo para pensar mucho en nada
tengo la sensación de estar renaciendo continuamente. 
Como si los días se hicieran tan cortos y tan distantes
que las noches se dulcifican para mantener este equilibrio.

La decepción que atenaza las almas de los involuntarios actores
está a la orden del día en cuanto a esperanzas se refiere.
Cuanto más salgo, más lo veo, más lo siento, más lo huelo;
cuánta desilusión resignada asoma por los balcones!!

Regados por la las aguas del conformismo, anegados por ellas,
los veo mirar hacia delante sin convicción alguna,
como si estuvieran cumpliendo un castigo ejemplar
por un delito que saben que nunca han cometido.

Veo sus ojos mirarme con extrañeza mientras los observo,
veo en su mirada un miedo escénico completamente innecesario.
Veo las carencias enterradas en susurros y caricias falsas.
Veo el color de sus almas difuminarse sin remisión por el desagüe.

Pasan rozando frente a mí, casi sin sentirlo, casi sin saberlo, 
interpretando papeles que ni han elegido ni saben expresar.
Quizá sea eso lo que pasa cuando la mentira interior es tan grande
que tan solo mirarla de frente supone la muerte clínica.

Y lo sé porque me reconozco en ellos, yo también estuve allí.
Yo también escupí sobre mis valores, yo también me odié por ello.
Yo también me engañé a mí mismo de esa indecente manera
que hace que engañar al resto de la sala sea tan sencillo.

De qué nos reímos tanto si aún no hemos hecho las maletas
para el viaje más importante, el único que realmente importa?
Por qué andamos tan de puntillas sobre nuestras esencias
y pisamos tan fuerte sobre esta tierra de banalidades? 

Dónde exactamente se perdió la esperanza, el ideal?
Quién dijo que no somos dueños sino dóciles siervos
de nuestras más oscuras pasiones y secretos anhelos?
Y por qué me da la impresión de estar hablando sólo?

Impresionantes despliegues de medios para tramas sin sentido;
saludos vacíos a viajantes que nunca se han ido, ni se irán.
Pesquisas profundas sobre asuntos tan tremendamente baldíos 
desenfocan los verdaderos placeres y los hacen ficticiamente continuos.

Tengo que reconocer que no me inquieta, pero me entristece
ver que no hay salida de esta jaula de peces amarillos,
tan sólo porque no se ven los barrotes y estamos convencidos
de que ésto es lo que hay, y no tiene ningún sentido.

lunes, 1 de agosto de 2011

Pretenciosamente Absurdo



Simpleza explícita
necesita de las alas
del sentido más primario,
el hambre.
Catacumbas al anochecer
suenan a tambores de guerra
cuando amanece.
Pensamientos corrompidos
saben a pieles tersas
con menos primaveras que la mía.
Propongo no mirar al cielo
para pedir imposibles
hasta mañana.

Un jinete a lo lejos me evoca
la carrera contra el tiempo
en la que voy a perder,
seguro.
Y acostumbrarse a perder
es como ceder a la presión
en un ritual tribal moderno.
Junto los dedos índices de las manos
y pretendo pedir
un deseo a la oscuridad,
que resulta inútil,
pues la oscuridad
no habla mi idioma,
ni falta que le hace.

Qué pretencioso me vuelvo en la euforia,
y, a la vez,
que anaranjado me hace verme.
Dejar de repente de buscar cebada
en un campo de centeno,
ayuda,
sin duda.
Separar el grano de la paja
debería ser deporte nacional,
pero va a ser que no.
Y yo digo que sí al trigo sucio,
siempre que venga
bien aseado de casa.

¿Para qué intentar convencer
a nadie de nada
si nada sé ni me importa?
¿Para qué darte el coñazo
con teorías súper elaboradas
si tu estás mejor sólo?
¿Para qué intentar explicarme
si tus ojos saben que miento
día sí y día también?
¿Y para qué darte
el placer de echarme
si ya sé dónde está la puerta?

Estando aquí sentado
se me ocurren
tantas tonterías a la vez,
así,
inconexas,
que al juntarlas
cobran sentido con intereses,
como toda buena sarta de idioteces.
Será que cuanto más juntos
están los sinsentidos entre sí
más clarividentes se vuelven
para unos ojos mundanos
como los míos.

Y no son los ojos
los que marcan
la diferencia al final,
no son las pupilas.
Ni son las telas de fondo
que anidan tras ellos,
es lo que hay detrás.
Al correrlas,
descubren a mi juicio
y a mis sentidos,
mi mundo
y mis abismos.
Te guste o no,
en el fondo,
son ellos los que te miran.

Respirarte sin mascarilla
me da una alergia
que no me quitan las pastillas.
Y ya tengo bastante sueño de normal
como para narcotizarme artificialmente.
Así que lo mejor será
darle un tiempo
al bochornoso carácter de estos días
y dejar las incredulidades
y las náuseas vecinales
para los dias venideros.

Mientras,
haré aguas en alta mar
con marejada de gruesa
a muy gruesa.
Y, por si acaso,
no pensaré en volver,
no sea que me ahogue
y encima me guste.
Eso sí,
te traeré de recuerdo
un erizo de mar
y una estrella también de mar
porque no me veo
trayéndote un coral,
que me lo inutilizas.

viernes, 15 de julio de 2011

MAD

tejas rojizas como un campo de amapolas, salpicadas por el blanco atrevimiento de las fachadas y la indiferencia de los grises que desearían ser mas intensos. una enorme pecera de cristal cuyos limites no se ven, no se tocan, pero se sienten, tan cristalinos que parecen no estar, pero tan sólidos y reales que da miedo acercarse. unas aguas tan cálidas como la matriz de la que todo proviene, o al menos eso me dijeron y me lo creí. esa tranquilidad de lo conocido y lo familiar, de lo confiable y de lo seguro, hace que amarla sea un deber del que no hay posibilidad de huída. contraje una deuda de sangre con ella y pasaré el resto de mi vida pagándola con una mezcla de resignación y despecho para darme cuenta después de que así he elegido hacerlo.

y lo elijo. aún y todo así es. a sabiendas. a trompicones, pero con decisión. a fuerza de la costumbre de hablarla y besarla y tocarla; por sus embriagadoras noches, largas e inspiradoras, por sus días, tan tristes por no ser tan ceniza como les gustaría, por no ser tan amargos como pretenden ser. ocultando su dulzura como una luna entre las nubes, intentando convencer de su hostilidad sin creerselo del todo. dando a entender que no, que no es lo que es, que no siente lo que siente ni hace sentir de esa manera que sólo los que viven en ella saben con una certeza que duele y a la vez acaricia como solo una madre sabe hacer.

tal vez la abandone, tal vez más pronto que tarde. tal vez le sea infiel con horizontes de mar y sueños de cielos más abiertos y puros. tal vez me deje conquistar por atardeceres tan naranjas como yo mismo, tal vez me permita el lujo de mentirme y olvidarla metiéndola en una cajita de porcelana en algún lugar entre mis recuerdos. tal vez sea decisión del destino que forme parte de mí durante solo un tiempo. tal vez haya sido tan dura conmigo que no soy capaz de entenderla y amarla al mismo tiempo. tal vez sea que no estoy preparado, tal vez sea que es demasiado para mi pequeña mente mundana.  

hasta que ese momento llegue, hasta que el día de partir y dejarla sea una x en el calendario, no puedo más que agradecerle haberme dejado estar aquí. haberme dejado vivirla como lo he hecho. haberme dejado caminarla y mirarla con admiración y respeto. haberme permitido ensuciarla, insultarla, despotricar de ella y volver después a su seno con lágrimas en los ojos. haberme dejado ver sus entrañas al descubierto, haciéndome sentir su dolor como mío propio. haberme dejado ser tan parte de ella como yo he querido, haberme infectado con sus virus de grandeza y placer. haberme dejado vislumbrar cómo de bella puede llegar a ser y cómo de hostil le gusta aparecer a los ojos extraños.

ella me lo ha dado todo sin preguntar, y es sólo su indiferencia cada vez que salgo por esa puerta la que me parte el corazón en el fondo. pero de alguna manera simpre formaré parte de ella. porque me ha visto llorar desconsolado, me ha visto caminar de la mano del candor, me ha visto romper cristales contra el suelo. me ha visto perdido en su mar de asfalto y cemento armado, me ha tenido en la palma de la mano guiando a otros por sus recovecos. me ha visto mojado y aterido, y también suplicando clemencia a los astros. y también me ha cuidado frente a los desvarios estivales y me ha sacado de la pobreza de mis más profundas miserias.

éste día, éste lugar, ésta sensación, ésta realidad. vivir aquí. vivir en Madrid. y no querer vivir en ninguna otra parte.

lunes, 11 de julio de 2011

have you ever?

have you ever
been introduced
to someone
who didn´t know you,
to someone
who never thought of you,
to someone
who didn´t expect you?

have you ever met
a midnight stranger
when there´s more
to say than ever,
when instincts
and cold drinks
seem to have
their own oppinion,
their own willing?

have you ever felt
the heat inside
just before a first kiss
just after an iced gin?
have you ever tasted
the sweet flavour
of unexpected,
unnoticed lips?

have you ever seen
that look in someone´s
elses deep blue eyes
that are simply praying
that promises made outside
do not matter tonight?
that we will try to forget
all about them easily
the next couple of hours?

have you ever, then,
just have the ring
of the mercy bell
inside of your head?
have you ever, then,
taken your finger
off the shinning trigger?
have you ever, then,
put your gun down
knowing you will regret
before hitting your bed?

have you ever just
looked some other way?
resigned all pourposes,
just because you felt ashamed?
let her go away forever
knowing paths will never
ever get to cross again?
have you ever taken
all your stuff with you
without nothing to lose
and cut the winning streak
just becuse you had to?

then, you know for sure
that the morning after,
even though you know
that leaving the battlefield
was the right thing to do,
even though you know
that it was not for you.
even then, i swear,
arises this strange feeling
that chances
are just chances,
and choices are just
half the way ahead.
but for some reason,
deep inside memories
screaming out loud
that in the very end
what you did was wrong
and there´s noting else
you can do to silence
how foolish you´ve become.

miércoles, 29 de junio de 2011

it is not...........





It is not that i miss you. 
It is not that it makes me sad. 
It is not that i do not hate you. 
It is not that my pride is in command. 

It is not that i feel sorry for myself, 
it is not that i am down again. 
It is not that it seems 
that all this work was not worth  
all the tears and lonely nights 
i have buried deep inside this hole. 

It is not that i recall you 
dressed in your red dress. 
It is not that i recall you 
early in the morning 
lying on my summer bed.  

It is not i am not aware 
of my addiction to you. 
It is not i´ve been so cold 
that i cannot say a word 
about how i am suffering 
this tempting, 
shinning gold. 

It is not that i´ve seen 
the look in your eyes 
that said to be true 
what was just a lie. 

It is not that i seem 
to be able to touch 
what has turned into 
something out of reach. 

It is not that i am scared 
of never going back. 

It is that it seems to me 
you do not care at all. 
It is that it seems to me 
you are so far 
that i will never get 
to understand what 
crossed your mind inside. 

It is that i was wrong 
and you were right. 
It is that i lost myself 
while you found my scars. 

It is that i´ve been so close 
i´ve burned my mind 
trying to get to you 
and trying in return 
to make you love me too.  

It is that i am sorry, 
i am frightened, 
i am lost. 
It is that i am discouraged 
just by seeing you again. 

It is that i am far from where 
i am supposed to be lying. 
It is that i am dissapointed 
just by watching us die. 

viernes, 10 de junio de 2011

delusion

grasping the air,
waiting in vain.
declaring bankrupt
on my heart inside.
consumption arises
to those who tried
to live in pain
against themselves
or another times. 
the stars above
have nothing to say
instead of asking
lets try to forget
how we got here, 
how we ended dead.
i came here not for regrets,
i wondered why you
were never there
when i screamed 
as loud as i could
just for some respect.
partying made me
take memories away.
drugs took myself
to my own paradise
where my thoughts and strives
were no longer in control
of my just learnt wisdom.
into the land of forever
i drove my crazyness
so fast i just could
hit and run.
disregarded and betrayed,
inusually discouraged,
hurt on pourpose,
left alone to die alive.
now i am on possesion
of you tricks and lies.
let make them mine,
i´ll use them wisely.
now i see the result
of my delusions
into my very sad of you,
too late to start anew.

un verde casual

llegó un tarde de abril
de la mano de la primavera
junto con una promesa
fuxia, roja y violeta.
un acomodo provisional,
una luz parcial,
una presencia más
que no pude acallar. 
nos ignoramos
mutuamente
durante días
hasta que, 
a fuerza de mirarnos
a hurtadillas,
llego la curiosidad.
no se por qué o cómo, 
no se por qué o cuándo, 
empezamos a querernos
a fuerza de la rutina
de yo paso y tu miras,
o tu distraida y yo
entre las cortinas.
pero de alguna forma
nos unimos por azar
su tristeza era la mía, 
mi alegría era su savia;
mis lagrimas la regaban
y en su tierra yerma
mis raices crecían.
y, de pronto, asi sin más,
ella se me hizo a medida
y yo me dejé conquistar.
se metio dentro de mí
y empezo a espiar. 
saco sus conclusiones
y no me dio opción,
ninguna, de protestar.
y cuando quise darme cuenta
ella era mi termómetro, 
ella era mi altar.
mi tristeza la marchitaba,
mi euforia la hacia intentar
salirse de su habitat natural
y buscar nuevas tierras
que poder conquistar.
y ahora, ahí está, 
mirandome confiada, 
sabiendo que la tormenta 
acaba de pasar, 
se erige con valentía 
luchando con la gravedad
de alguien que sabe
lo que va a pasar. 
ella no habla, 
no dice nada,
pero sabe de mí
más que cualquiera
sin preguntar.
mi pequeña hierbabuena
como te voy a cortar
para hacer mojitos
si tu vida y la mía
de la mano van......


miércoles, 8 de junio de 2011

how can i

feeling free
if he tells me what he knows
i´d like to know
where´s the hidden place
i´ve heard about.
not so far from here
i could make it by the evening
hoping to give sunshined lands
to those unforgivers
who had lost their view.
clean from dust and pain
the path to this word
becomes longer and longer
as if it was growing
deep into an unknown world.
tell me all that you know,
show me what you have to show.
hit me with the truth
living by the trees.
can you understand
that when the day is gone
nothing between us
will be the same.
do not hesitate to ask
as if i´d be gone tomorrow
what are my thoughts heading to
an where are you in my head.
behind me you will only find
all the truths and lies
i´ve been told long ago.
how can i
even try to find
if searching is a mistake.
who can tell
what lies under the carpet
or which dreams are waiting
making the princess of the sky
drop crystal tears
on the whispering wind.