martes, 10 de julio de 2012

Un Instante Antes





De no pensar nada 
pasé a pensar en todo. 
De ese todo, 
más de la mitad era paja. 
De esa paja, 
más de dos tercios era falso. 
De lo falso, 
casi tres cuartos era verdadero. 

De la verdad 
sólo me puedo fiar si tengo dudas. 
Pero la duda no tiene madre,
ni padre, 
sólo hijos e hijas. 
No obtuve respuestas 
de conversar con ellos.  
Sus palabras sólo me llevaron 
 a otro mar de preguntas. 
Esta vez, 
en vez de navegarlas, 
las maquillé 
para que no parecieran
 tan confusas. 

Y en la confusión
me quedé parado. 
Parándome llegué al centro 
desde donde todo se ve 
con un filtro menos negro. 
Y es desde ahí es desde donde 
las cosas tienen un comienzo. 
Un comienzo desde la nada 
hacia algún sitio incierto. 

Porque hoy, 
lo que de verdad tiene importancia, 
no es llegar a buen puerto, 
si no la certeza de que si me amas 
es eso con lo que soñaré 
justo un instante antes 
de saber que estoy muerto. 




domingo, 8 de julio de 2012

Escenas Costumbristas





El dolor de cabeza, 
el dolor de los demás.
La curiosidad del momento, 
no querer saborear 
el placer del descontento. 
La paz sin responsabilidad, 
los escrúpulos al final. 
Una comparativa vital: 
yo soy yo, 
y tú, 
querido amigo, 
tú no vales más. 

Huracán bi-direccional, 
ver la muerte desde atrás. 
La culpa debe ser de otro, 
yo no pude hacer más. 
Relámpagos por la espalda 
matando sin preguntar 
que es aquello que hicimos, 
por qué nos salió tan mal. 
Costumbres populares, 
dar amor con condiciones, 
confundir la amistad 
con intereses comunes hoy 
porque mañana dios dirá. 

Mantener la estadística, 
besar por inercia, 
plastificar caricias, 
sexo de usar y tirar. 
El talento de fingir, 
pretender por dinero, 
misterios de la vida, 
un brindis por el miedo. 

Buscar resquicios 
en inseguridades ajenas. 
Sacar de quicio, 
hurgar en las penas. 

El recurso del consuelo 
de optar a medalla 
en la olimpiada diaria 
de juzgar sin pensar 
con la mente cansada, 
del no querer saber, 
y de lo que es peor, 
del no importar nada. 




martes, 3 de julio de 2012

Memorias Estancadas






Recuerdo andar por la orilla, 
la espera, 
el sabor, 
las mareas... 
Recuerdo el mirar 
sin ver. 
Recuerdo el saltar 
sin red. 

Recuerdo los paseos, 
las trifulcas, 
los besos, 
las indirectas... 
Recuerdo abusar 
sin juez. 
Recuerdo beber 
sin sed. 

Recuerdo las mentiras 
como noticias de radio,  
las que leía en tus ojos, 
en tus manos, 
en tu ira, 
en la lengua 
de tu descaro. 

Recuerdo las comparaciones, 
las sabanas. 
De los hoteles, 
las ventanas. 
Recuerdo las carreras, 
las intenciones. 
De las demoliciones 
los cimientos. 
Recuerdo las caídas, 
los inventos, 
las cascadas 
de acontecimientos. 

Recuerdo no tener guión, 
improvisar, 
embriagar, 
hacer aguas 
al bailar. 

Recuerdo llamadas, 
ya muy tarde, 
en noches claras. 
Recuerdo el salitre, 
escamas en la playa. 

Recuerdo decir basta, 
ya está bien, 
no tener ganas 
de mirarte nunca más 
directamente 
a la cara. 

Recuerdo prometer acordarme, 
no olvidar. 
Recuerdo detenerme, 
negarme a pasar, 
raparme el pelo, 
salir de la cueva, 
hacer borrón 
y cuenta nueva. 

Memorias estancadas, 
qué triste es 
no querer ya 
acordarse de nada.