o dada la hora que es
buenas noches
estará bien.
Antes que digas nada
me presentaré:
Antes que digas nada
me presentaré:
soy el amor
he venido a verte.
No es la primera
y,
dependiendo del tiempo
que falte
para el ocaso de tu vejez,
puede que ésta tampoco
sea la última vez.
he venido a verte.
No es la primera
y,
dependiendo del tiempo
que falte
para el ocaso de tu vejez,
puede que ésta tampoco
sea la última vez.
No te hagas el sorprendido,
entiendo que estés asustado.
Se que no esperabas verme
antes de que cesaran
los vientos de este marzo
que han volatilizado
tu tristeza del pasado.
Se que piensas
que debería
haber pasado un abril
con sus lluvias regando
tus esperanzas
tus deseos marchitados
y al despedirse
con un abrazo
daría paso a un mayo
que portara en sus labios
una promesa de verano.
Se que piensas
que es pronto para ti.
Me disculpo,
nunca suelo avisar
con antelación
antes de venir.
Pero mírame,
amigo mío,
lo importante ahora
lo importante ahora
es que estoy aquí.
Espera,
relaja tu respiración
tus hombros
tus manos
y se relajará
tu corazón.
No te fíes
de tu realidad
construída
de recuerdos
de los que eres esclavo
por creer que con ellos
estarás siempre a salvo.
Olvídalos por un momento,
apártalos a un lado.
Tranquilo,
no pienses en vano.
Nada juzgues antes
de intentar entender algo
de lo que te estoy hablando.
Sabiás que eventualmente
nos tendríamos que conocer.
Sé que me buscaste
largo tiempo
sin saber
que nunca me encontrarías
a no ser
que yo quisiera antes
deliberadamente
dejarme ver.
Existo
desde tiempos pretéritos.
Desde que el primer humano
al que me presenté
se sintió único
y cayó enfermo
de los celos
al ver como sus semejantes,
al igual que él,
con la punta de los dedos
y sin ningún pudor
manoseaban mi piel.
al igual que él,
con la punta de los dedos
y sin ningún pudor
manoseaban mi piel.
Por mí se han
declarado guerras
y se han matado
poseídos enemigos
que entre ellos
eran hermanos.
Por mí se ha vertido
tanta sangre
tanta sangre
que roja se volvió la tierra
al igual
que ríos,
mares
y océanos.
que ríos,
mares
y océanos.
Por mí se han hecho milagros
y han caído grandes imperios;
se han erigido monumentos
palacios, tumbas y templos.
Por mí han nacido héroes
cuyos recuerdos
han sido escritos
en la historia
con letras imborrables
para el implacable
paso del tiempo.
Te han hablado de mí
otros que me conocieron.
En realidad
son muchos más
los que presumen
de haberlo hecho
que los que,
en verdad,
tomaron como propio
el desafío incierto
de mirarme a los ojos
ignorando el fuego
cuyo brillo azul
azuzado por el miedo
les prendió por dentro
y se entregaron,
sin condiciones
y sin lamentos,
al perfume que mis besos
iba dejando en sus cuerpos.
tomaron como propio
el desafío incierto
de mirarme a los ojos
ignorando el fuego
cuyo brillo azul
azuzado por el miedo
les prendió por dentro
y se entregaron,
sin condiciones
y sin lamentos,
al perfume que mis besos
iba dejando en sus cuerpos.
Así,
ante ti me presento.
No eres un elegido
era cuestión de tiempo.
Lo único que sucede
es que para conocerme
debes desterrar
de tu espíritu
la desconfianza
el desasosiego
en el que estás sumido
por no tener los ojos
lo suficientemente abiertos.
Está en tu mano
hacer que este encuentro
sea anecdótico
o se convierta en eterno.
Es tu decisión
pasar de largo este sendero
o caminar por él
dejando de mirar al suelo.
Si decides quedarte,
si me fías tus deseos,
una advertencia he de hacerte
que derretirá tus hielos,
pues por mis servicios
has de pagar un precio.
Una única regla tengo
si me fías tus deseos,
una advertencia he de hacerte
que derretirá tus hielos,
pues por mis servicios
has de pagar un precio.
Una única regla tengo
y es para todos
los mortales
de obligado cumplimiento.
los mortales
de obligado cumplimiento.
Mis encantos perderán
su sagrado efecto
si pretendes encerrarme
tras barrotes de hierro
pues no hay para mí cárcel
que no conlleve
para ti
una visita sin guía
por el más triste
de los desiertos.
su sagrado efecto
si pretendes encerrarme
tras barrotes de hierro
pues no hay para mí cárcel
que no conlleve
para ti
una visita sin guía
por el más triste
de los desiertos.
Si intentas poseerme
sólo conseguirás enviarte
sólo conseguirás enviarte
a un largo destierro
pues cuanto más me amarres
más cabos quedarán sueltos.
Cualquier esfuerzo
por controlar mis secretos
está destinado a morir
con los zapatos puestos.
por controlar mis secretos
está destinado a morir
con los zapatos puestos.
Así pues
no lo intentes,
te lo advierto:
no lo intentes,
te lo advierto:
nunca podrás hacerme
únicamente tuyo
pues a nadie pertenezco.
No es ese el camino,
o al menos no es
el que yo te recomiendo.
el que yo te recomiendo.
que la propiedad no está
entre mis fundamentos.
Yo sólo haré germinar
lo que tú ya llevas dentro
la capacidad de amar
sin que necesariamente
ese amor te sea devuelto.
Y has de saber
en último término
que no me quedaré
aquí para siempre
a no ser
que me acojas
por completo
dentro de tu seno
y entiendas que
para hacer de mí
un leal compañero
para hacer de mí
un leal compañero
el sacrificio
necesario
será tremendo.
Pero he aquí
la recompensa,
he aquí el premio:
si consigues
la recompensa,
he aquí el premio:
si consigues
de verdad entender
lo que siento
y hagas tuyo
ese sentimiento
a través de mí
tu también,
querido amigo,
querido amigo,
te volverás eterno.